Por: Eduardo Zaragoza
Sueños de redención 3/5
Venganza y redención. Tan simple y a la vez tan complejo. Así debió pensarlo Alejandro González Iñárritu antes de comenzar a dirigir El Renacido, su filme más ambicioso y comentado a la fecha. Sí, es el mismo hombre que nos dio Birdman.
Hugh Glass (Leonardo DiCaprio) es un cazador que comercia pieles y que en una expedición es atacado por guerreros Arikara junto con el resto de su compañía. Las cosas se complican y tienen que huir, pero la suerte de Glass empeora cuando una Grizzly lo ataca brutalmente dejándolo medio muerto. De hecho lo deja 99% muerto, pero el hombre se aferra a la vida y a su hijo, quien también lo acompaña en la peligrosa empresa. Con su vida pendiendo de un hilo, su suerte se tornará aún peor y su hijo muere a manos de John Fitzgerald (Tom Hardy), hombre que también entierra vivo a Glass y lo abandona en lo salvaje para que irremediablemente muera. Mala decisión. Cuando le quitas su hijo a un hombre, le dejas absolutamente nada que perder y una sed de venganza insaciable. Glass milagrosamente sobrevive y sueña con justificar sus razones de venganza con la sangre de Fitzgerald; ni el diablo podría detenerlo ahora.
Leonardo DiCaprio es un fuera de serie y en esta película se convierte en una fuerza de la naturaleza. Es cierto que el rodaje fue demandante al extremo y que las condiciones fueron realmente tortuosas, pero el talento del hombre sobresale instantáneamente, luciendo más que el impresionante festín visual que construyeron Iñárritu y el virtuoso Emmanuel Lubezki. Oh, Lubezki, el gran genio de la fotografía usa solamente luz natural para elaborar otra joya óptica de niveles estratosféricos, una que debería ser reconocida con el Oscar. Lubezki es el amo de la fotografía en este momento, pero con cada película sorprende un poco más y más.
Tom Hardy, uno de los mejores actores vivientes es el antagonista perfecto. Fitzgerald es un simple ser humano, uno lleno de ambición, de miedo a morir y sí, también de maldad. Me quito el sombrero ante Hardy y su gran talento. El tipo es una estrella.
Y sí, la edición de Stephen Mirrione es impecable, sí, la música de Ryuichi Sakamoto y Alva Noto es hechizante, sí la edición y mezcla de sonido son de primer nivel y sí, los efectos visuales son magistrales – el ataque de la grizzly puede helarles la sangre – pero no, el guión no es redondo y sobre todo es una película sobrada, intentando ser demasiado algo que no es.
Iñárritu y Mark L. Smith se basan en la novela de Michael Punke para contar una historia que dura muchísimo y se llega a sentir muy pesada, muy lenta. Y hay una razón. No tengo tanto problema con las incontables tomas del bosque, las montañas y los ríos, es la manera de hacerlo lo que no es satisfactoria. Porque Iñárritu intenta hacer cine de arte y lo intenta demasiado, con resultados infructuosos, que salen sobrando. No todo el tiempo hay que ser conceptual al extremo para alcanzar niveles de belleza plástica real, de cine hermoso y poético, pero el director piensa que más siempre es más, y no es así. En El Renacido no aplicó el freno el momento justo como sí lo hizo con Birdman, pero también hay que reconocer que es un cineasta arriesgado que no le gusta jugar a la segura, y eso e agradece.
A pesar de no ser una grandiosa película hay algo que brilla intensamente de principio a fin y es DiCaprio; El Renacido es total y absolutamente el show del actor. La película es arriesgada y poderosa y es, en gran parte, gracias a su protagonista, quien lleva sus aptitudes físicas al límite que se le exigió, cumpliendo de maravilla, como ya es una costumbre con él; te atrapa desde el inicio para hacerte sentir todo lo que él experimenta y hacerte desear que al final logre su cometido. Suena fácil pero no lo es, y es por eso que El Renacido vale la pena, porque es una simple historia de venganza y redención pero al mismo tiempo es más que eso, mucho más, gracias a Leonardo DiCaprio. Tan simple y a la vez tan complejo.
The Revenant (Fox)
Estados Unidos, 2015
Director: Alejandro González Iñárritu
Elenco: Leonardo DiCaprio, Tom Hardy, Domhnall Gleeson y Will Poulter.