El Hombre de Hierro muestra su lado más humano 3/5
Por: Eduardo Zaragoza
Con el estreno de Los Vengadores (The Avengers) hace un año, Marvel y Disney lograron una gran película de súper héroes que encantó a la crítica y a la audiencia global por igual. La cinta se convirtió en un fenómeno muy querido y además es hoy la tercera más taquillera de la historia y la segunda parte ya tiene luz verde. Pero antes de que eso pase, hay que ver a los vengadores en solitario y lidiando con sus propios enemigos.
Iron Man 3 retoma la acción después de los sucesos de Nueva York; la invasión extraterrestre, la amenaza de Loki y la súper destrucción y caos que vimos en Los Vengadores. Tony Stark quedó traumatizado por la experiencia y sufre ataques de ansiedad, pánico, no puede dormir y teme perder a su querida Pepper Potts. Pero hay otros problemas; un terrorista llamado El Mandarín está sembrando miedo y caos por ahí y un científico, obviamente loco, se aparece para complicar más la situación.
Una invasión extraterrestre que amenaza con un armageddon debe ser horrible, el miedo a perder a tu amada también, y que un terrorista te quiera asesinar no debe ser poca cosa, pero Iron Man puede con todo ¿no? Pues parece que no, y aquí encontramos uno de los puntos débiles de la cinta. Para explicarlo hay que poner las cosas en contexto.
En las películas de Marvel, más puntualmente aquellas que involucran a Los Vengadores, siempre hay mucha destrucción, muchas batallas, explosiones, muertos y finales bonitos. Parece que no importa que grandes tragedias ocurran, al final todo se arregla por uno o varios héroes que van más allá de lo heroico, son casi divinos. Por eso al ver a Tony Stark tan compungido y en una crisis de tal magnitud, uno se rasca la cabeza y se frota las manos. Uno se emociona al ver que hay retos que pueden hacer palidecer al Hombre de Hierro y darnos momentos memorables. El drama y el cine de súper héroes no están peleados. La trilogía de The Dark Knight rompió esquemas y revolucionó la manera de filmar en todos niveles; nos mostró que las historias basadas en comics pueden ser muy serias y triunfar rotundamente. Los personajes de ese universo de Batman son muy humanos, sí son heroicos pero en el fondo sangran y sufren como cualquiera. Con Marvel eso no sucede. Thor, Iron Man, el Capitán America y Hulk son súper hombres (uno es un Dios) que se encuentran de frente con el peligro, les cuesta trabajo ganar, y al final triunfan y con una sonrisa. En Iron Man 3, el director Shane Black intenta mostrar a un Iron Man de carne y hueso (por extraño que esto suene) y así inyectarle más suspenso y dramatismo a la historia. La verdad es que no lo logra jamás y sólo le agrega paja y lentitud a la película. El malo es malo indudablemente pero no todo es lo que parece y hay unas cuantas sorpresas esperando. La trama es un poco enredada, no es la gran cosa, pero podrían haber trabajado más en el guión y darle más profundidad, vamos, hacer una historia más solida.
Pero siendo sinceros, la película no está mal, no es aburrida y es mucho mejor que Iron Man 2. Las secuencias de acción son buenas y tiene emoción y explosiones para llenar todas las cubetas de palomitas que quieras. Hay escenas y personajes que sí son muy bizarros y hasta innecesarios, pero Iron Man trata de 2 cosas: acción y Robert Downey Jr.
El actor es un prodigio y vuelve a mostrarse dueño del personaje, llena la pantalla cada que aparece, pero además sabe como modularse y nunca opaca a sus co-protagonistas. Sin Downey Jr. no habría Tony Stark, pero ni remotamente.
Iron Man 3 no es la mejor cinta de la saga, ese honor lo ostenta la primera parte. Tiene buenas actuaciones, buenos efectos, risas y vueltas de tuerca que cambian a algunos personajes para darles un poco más de impacto. Cumple y entrega un bonito espectáculo que sólo obliga a una cosa: entretener en buena forma.
Iron Man 3 (Marvel)
Director: Shane Black (Kiss Kiss Bang Bang)
Elenco: Robert Downey Jr., Gwyneth Paltrow, Guy Pearce, Ben Kingsley y Don Cheadle.
¡Qué puedo decir! Yo soy completamente fan de la trilogía y la actuación de Robert Downey Jr. me parece maravillosa, sin embargo pienso que a ésta tercera entrega distó mucho de ser lo que yo esperaba, sólo me parece buena y entretenida, yo también me quedo con la primera parte y de la segunda rescato al admirable Mickey Rourke. 🙂
Otra vez coincidimos totalmente, ojalá y Los Vengadores 2 sea genial.